domingo, 28 de febrero de 2010

MADRID - HAMBURGO - BERLÍN

Ya estoy en Berlín, en casa de Stefan y Danny.
Por fin pude salir de Madrid, aunque no sin suspense, no podía ser de otra manera.
Cuando llegué a la estación sur de autobuses, la persona de taquilla de Alsa me dijo que como había llegado con menos de una hora de antelación, no podía darme el billete (que no vendérmelo, porque ya lo había comprado por teléfono), pero se ve que era una dama de tendencias sádicas, ya que a continuación me dijo que bajara al andén y que allí, si había tiempo, igual tenían mi billete.

viernes, 26 de febrero de 2010

PRIMER DESTINO... MADRID

Es viernes 26 de febrero y estoy en... Madrid. Sí. Ayer no pudimos coger el vuelo Madrid - Berlín de EasyJet porque se había cancelado, supuestamente por la huelga de controladores de Francia. Al llegar había ya unas colas tremendas de gente intentando informarse, reclamar o cambiar su vuelo. Todo entre una gran confusión porque el servicio de las compañías aéreas es patético. Mi amigo Christian se colocó en una cola y yo en otra. Estuve más de dos horas sin saber para qué era esa cola (el resto de la gente tampoco lo sabía muy bien). Al final llegó Christian antes a su mostrador y al intentar cambiar el vuelo, ya sólo quedaban tres plazas para el domingo a las 20h10.

martes, 23 de febrero de 2010

LOS ENSERES

Esta mañana nada más levantarme me he puesto a preparar la mochila. La foto es de antes de llenarla, tenía la duda de si me cabría todo y sí que cupo. Lo malo es el peso: 16,5 kg.
Mi idea era no pasar de los 15 kg, pero ¿qué dejar fuera?. Lo que más pesa es el equipo fotográfico, pero no me voy a ver en otra ocasión en mi vida para hacer fotos, así que llevo la cámara, tres objetivos y un mini trípode que no es muy ligero por ser metálico. Luego están el resto de aparatitos electrónicos: el eBook con todas las guías, mapas y libros que me ha dado tiempo cargar; el iPod con un montón de música; el móvil para estar alguna vez localizable, hacer conversión de monedas con la calculadora y jugar al ajedrez; también llevo un mini disco duro portátil para guardar las fotos, y donde además llevo todos mis conocimientos pasados, presentes y futuros. Como todos estos cacharros comen voltios, pues adelante con los cargadores.

PLAN DE VIAJE – CARTA EXPLICATIVA PARA EL CONSULADO MONGOL

Inicio este diario con la carta que tuve que escribir al consulado de Mongolia para que me concedieran el visado para atravesar su país. Resulta que entre otros requisitos, para obtener el permiso se deben adjuntar los billetes de ida y vuelta a España (entendían que debería tener un billete de avión Madrid-Moscú y otro Pekín-Madrid), pero dadas las caracterísiticas de mi viaje, no disponía de ninguno de los dos. Hablé con el consulado y les expliqué el viaje, les pareció una argumentación muy convincente y me pidieron que les enviara una carta con lo que les había contado.
Como sólo disponía de media hora antes de que cerrara el consulado, escribí el texto con premura. El que aquí os presento está ligeramente retocado frente al original, corrigiendo algún detalle que no me dio tiempo a elaborar mejor.